La Isla Robben, ubicada cerca de Cabo Frío, en Sudáfrica, es conocida mundialmente porque allí pasó 18 de los 27 años que estuvo preso Nelson Mandela, quien luego se convirtió en el primer presidente negro de su país y en Premio Nobel de la Paz.
En la actualidad la cárcel fue convertida en un museo y el lugar fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, por su importancia cultural e histórica como testimonio de la opresión y el racismo que imperaban antes del triunfo de la democracia y la libertad.
Por otro lado, la Isla Robben también despierta un alto interés por su flora y fauna, ya que allí existen más de 100 especies de aves, entre las que destacan grandes colonias reproductoras de cormoranes y gaviotas, y pequeñas manadas de antílopes.
Te invitamos realizar un emocionante recorrido por el lugar, en el que podrás descubrir cómo era la dura vida durante el Apartheid -el sistema de segregación racial de Sudáfrica- a través de la voz de un antiguo prisionero.
Además, allí podrás visitar la celda de 2,4 x 2,1 metros donde Mandela pasó casi dos décadas encerrado, siendo obligado a realizar trabajos forzados y pudiendo recibir una sola visita al año.
El tour incluye la recogida en hoteles y alojamientos del centro de Ciudad del Cabo, el billete de ferry para ir y volver a Robben, un paseo en autobús por la isla y la visita a la cárcel hoy convertida en museo.
El viaje en barco dura unos 45 minutos y depende de las condiciones climáticas, por lo que en algunas ocasiones se cancela. En esos casos, el traslado podrá ser reprogramado directamente en las taquillas o se puede solicitar el reembolso.
El paseo, que dura unas 5 horas, finaliza al bajar del ferry de vuelta. Allí podrás optar por recorrer Ciudad del Cabo o regresar al hotel por tu cuenta.
La Isla Robben está ubicada en Table Bay y su nombre en holandés significa “isla de las focas”. Desde finales del siglo XVII el lugar fue utilizado para aislar a ciertos grupos de personas, en la mayoría de los casos prisioneros, enfermos o locos. También funcionó como colonia de leprosos entre 1836 y 1931.
El en siglo XX fue convertida en prisión de máxima seguridad y, además de Nelson Mandela, allí estuvieron detenidos Walter Sisulu, Govan Mbeki, Robert Sobukwe y Kgalema Motlanthe, entre otros presos políticos del régimen Apartheid.
La isla mide 3,3 kilómetros de longitud en la dirección norte sur y 1,9 kilómetros de ancho, con una superficie de 5,18 kilómetros cuadrados.
Hoy el lugar es un símbolo de la libertad y un recordatorio del difícil camino hacia la democracia que debió atravesar el pueblo sudafricano. Su museo está dedicado a preservar la memoria y las contribuciones de los luchadores contra la segregación racial que alguna vez estuvieron presos dentro de sus muros.